lunes, 18 de mayo de 2009

¿Confiar en el Congreso para arreglar la Constitución?


Los grupos que se oponen a la convocatoria de una Asamblea Nacional Constituyente se defienden diciendo que el Congreso Nacional puede reformar el 97% de la Constitución, y que lo único que no puede son los artículos pétreos.

La Constitución de Honduras en estos 27 años, se ha reformado una cantidad similar de veces a la Constitución de Estados Unidos y eso que esta tiene más de 200 años.

La pregunta que queda para toda esa gente y la hondureñidad es ¿confían en los diputados del Congreso Nacional?


Este es otro de los argumentos que han sacado para oponerse a una Constituyente, cómo diciendo que no es necesaria, diciendo que el Congreso puede hacer una reforma constitucional reformando la Constitución vigente.

Ahora la pregunta que se le puede hacer a los que afirman esto ¿es confiable el Congreso Nacional para estas reformas?, vemos que es irónico darle esa labor a los que han violado la Constitución una y otra vez en estos 27 años, porque desde el Legislativo en todos estos años han hecho lo que han querido con la Constitución y la han violado muchas veces.

La capacidad de los diputados es muy discutida en el arbor popular, y se sabe que estos representan los grupos económicos del país, ó sea que son falsos representantes del pueblo.

Esta gente quiere que la Constitución siga reformándose sin participación alguna de la hondureñidad, y que los políticos la toqueteen cuántas veces quieran, y todas esas violaciones son permitidas con la actual Constitución y la forma de reformarse la misma ¡es un artículo pétreo!.

DE LA REFORMA DE LA CONSTITUCION

ARTICULO 373.- La reforma de esta Constitución podrá decretarse por el Congreso Nacional, en sesiones ordinarias, con dos tercios de votos de la totalidad de sus miembros. El decreto señalará al efecto el artículo o artículos que hayan de reformarse, debiendo ratificarse por la subsiguiente legislatura ordinaria, por igual número de votos, para que entre en vigencia.

ARTICULO 374.- No podrán reformarse, en ningún caso, el artículo anterior, el presente artículo, los artículos constitucionales que se refieren a la forma de gobierno, al territorio nacional, al período presidencial, a la prohibición para ser nuevamente Presidente de la República, el ciudadano que lo haya desempeñado bajo cualquier título y el referente a quienes no pueden ser Presidentes de la República por el período subsiguiente.

Oponerse a una Constituyente y a una nueva Constitución es sinónimo a garantizar que los políticos la violen y además impedir al pueblo una participación directa en la toma de decisiones, por lo que sería imposible blindar a la Constitución, porque se le permitiría a políticos desde el Congreso Nacional hacer con la misma lo que quieran sin participación directa de los distintos sectores.

La gente que se opone a la nueva Constitución no mencionan tendenciosamente que la forma de reforma de la Constitución también es un artículo pétreo, y uno de los propósitos para hacer la reforma es blindar a la Constitución, y ese blindado no se puede hacer si se deja así cómo está las modificaciones Constitucionales.

Y seguramente seguirá en lo mismo la Sala de lo Constitucional, politizada hasta la médula permitiendo por razones políticas, la violación de la Constitución, si no miren la prueba con lo del 239 y 240, y muchos de esos diputados que traicionaron a la Patria al reformar esos artículos pétreos, siguen en este Congreso y a quienes ya violaron la Constitución le quieren dar la labor que la reformen para evitar la consulta popular y una nueva Constituyente.

Es muy conocida la forma cómo ha actuado el Congreso Nacional, quien incluso ha surrogado atribuciones del Poder Ejecutivo, contradiciendo la disposición de la Constitución, ¿y a ellos darles la labor de uan reforma completa de la Constitución?, vemos que sería un suicidio y una medicina peor que la enfermedad.

Ahora sale un frente cívico de defensa de la Constitución, lógicamente algo politizado, porque nos parece irónico que estos movimientos no existen cuando han violado la Constitución una y otra y otra vez, hasta artículos pétreos han reformado y han firmado tratados que atentan contra la Constitución como ser el TLC con Estados Unidos.

Mucho manoseo de la Constitución

A nadie le consultan sobre las reformas Constitucionales, el Congreso Nacional simplemente las hace, y si consultan es a unos pocos que no representan a la colectividad, esto posibilita a los políticos a estarla tocando múltiples veces, en 27 años la Constitución ha sufrido casi 30 reformas ó enmiendas, cantidad similar a las enmiendas que ha tenido la Constitución de Estados Unidos vigente desde el 17 de septiembre de 1787.

La salud de la Constitución nuestra ha sido violentada por culpa de políticos que carecen de seriedad y modifican a la Constitución a su antojo y la violan a su vez, porque tienen politizados a los organismos de justicia constitucional y no están obligados a la consulta popular, sin mencionar que el pueblo ha sido pasivo, y esta es otra cosa que les preocupa, porque permitir que se le consulte al pueblo es quitarle la pasividad del pueblo, y eso es algo que ellos necesitan para hacer de las suyas.

Nosotros pensamos que la mejor forma de blindar a la Cartamagna es que toda enmienda constitucional vaya a consulta popular mediante plesbicito y referendum, y que la Constitución no ponga obstáculos para eso y no nos limite a los hondureños, además que el organismo de defensa constitucional sea apolítico, y no dependiente de un Poder del Estado, y esto no es posible sin una nueva Constitución, porque en la actual la Constitución la puede modificar a su antojo 128 diputados del Congreso Nacional y los más de 7 millones de hondureños no tenemos voz ni voto.

Y también pensamos que ya es hora de dejar esa mentalidad retrógrada de la época de la Guerra Fría, y vemos un temor realmente preocupante de esta gente cuándo se habla el tema de una hipotética reelección.

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