Iglesia Católica condena vandalismo

Palacio Arzobispal, la Catedral e iglesia San Francisco se mantendrán cerradas durante varios días

Tegucigalpa, Honduras
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La Catedral Metropolitana San Miguel Arcángel amaneció, por séptima vez, tapizada de grafitis.

Las paredes de este monumental recinto sagrado, donde se venera a Dios, no se escapan de las garras del vandalismo que desde hace un mes y medio se ha apoderado de la ciudad. El sacerdote Carlo Magno Núñez, canciller de la Iglesia Católica, condenó los atentados a la que es sometida la Casa de Dios, cada vez que hay una manifestación "pacífica" de los seguidores del depuesto presidente Manuel Zelaya. "Rechazamos totalmente la actitud de estos grupos, pues hay formas más civilizadas de manifestarse", expresó.

El religioso informó que al menos en los próximos tres días no volverán a pintar, pues "de nada serviría, ya que se anuncian más manifestaciones".

Lamentó que los seguidores de Zelaya, lo único que se ganan con sus acciones es el repudio de la gente, independientemente de su credo o religión. "Esta gente no tiene ni temor ni perdón de Dios, deberían ponerse la mano en la conciencia antes de atentar contra la casa del Creador del Universo", repudió Miriam Paz, miembro del grupo de Caridad de la Iglesia Católica.

En cuanto a si la Iglesia interpondrá oficialmente la denuncia ante la Fiscalía Especial de las Etnias y Patrimonio Cultural, Núñez dijo que no lo harán, pues los trámites son tan engorrosos y al final no se investiga nada. Detalló que en el Ministerio Público solicitan que se denuncie con nombres, apellidos y hasta con evidencias para iniciar con una investigación.

Asimismo, desmintió que en La Catedral hayan francotiradores como irresponsablemente trascendió en un medio televisivo. "La gente que está en la cima de la iglesia son obreros que están reconstruyendo la nave central de la iglesia", aclaró. Pero la Catedral no fue la única que pagó el coraje de los manifestantes. Todo el centro de la ciudad se encuentra manchado, Negocios, edificios emblemáticos, el Palacio de Cabildos y todas las paredes que se encontraban a su paso fueron tapizadas.

Trascendió que los manifestantes están plasmando mensajes en contra de sus ideales a fin de responsabilizar a las personas que marchan por la paz. No obstante, es evidente que las letras y el color de pintura es casi un distintivo de ellos.

* Las claves:

Inversión. La Iglesia Católica invierte más de cinco mil lempiras cada vez que se borran los mensajes que escriben los manifestantes.

Atentado. En un mes y medio, las turbas han manchado en siete ocasiones la iglesia Catedral.

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